“Una cosa es cómo nos vemos nosotros y otra cosa la forma cómo nos ven Molina, Núñez y Prado. Ese es el problema”, dijo Miró Quesada, sonriente.
Cuando mas te la confunden, con soliloquios almibarados, o cuando callan en siete idiomas a pesar de que la pregunta es valida para quien gobierna, ¿qué estas haciendo?
Ahí esta el humor para decirle al Rey (Rey Rey incluido) que no esta vestido y que su pretendido traje lujoso es solamente un boxer con hueco.
No es gratuita la vigencia del humor político en la actualidad, de hecho diría que son precisamente los artistas del pincel quien mejor ha entendido que los medios están cambiando y que la opinión publica es ahora ahora una ola veloz en las redes sociales, algo que los politicos deberían de prestar oido.
"No vale picarse" como bien han dicho los organizadores es parte de educar la memoria y afilar el juicio critico ante los posibles candidatos, se debe terminar los tiempos donde uno no le quede mas que escoger entre "mocos y babas", o optar por "El mal menor", peor aun que se concientan candidatos que han hecho del cinismo y el olvido caudal de votos de gente que piensa que mientras se haga obra no importa que roben.
Si esta exposición ayuda a cambiar una opinión de presencia hasta el 16 de este mes en la galería Luis Miró Quesada Garland de Miraflores estará bien justificada.
La nota que aparece en la edición on-line de El Comercio:
En la inauguración de la muestra, que reúne los trabajos de Alonso Núñez, Mario Molina y Javier Prado, publicados a lo largo de los últimos diez años en El Comercio, el director de esta casa periodística, Francisco Miró Quesada, destacó la forma cómo los tres artistas abordan nuestro escenario político.El Comercio
“Una cosa es cómo nos vemos nosotros y otra cosa la forma cómo nos ven Molina, Núñez y Prado. Ese es el problema”, dijo Miró Quesada, sonriente.
A su turno, Mario Molina explicó que busca “humanizar” con su trabajo a los políticos locales. En sus palabras, “bajarlos de su pedestal haciendo comparaciones entre lo que suelen decir y hacer”.
“Esta es otra opción que la prensa escrita ofrece al lector, a fin de que este pueda acceder a los errores en que los políticos incurren a diario”, explicó Mario Molina, en el segundo día de la exposición No vale picarse, inaugurada ayer en la galería Luis Miró Quesada Garland de Miraflores y que va hasta el 16 de mayo.
En tanto, su colega Alonso Núñez consideró que ser un “maniático de la observación” lo llevó desde muy pequeño a especializarse en el diseño de caricaturas. “Siempre me fijaba en las formas y encontré que el lenguaje gestual del ser humano es riquísimo en posibilidades”, contó.
Por su parte, Javier Prado refirió que su idea es acercarse un poco más a la gente vía las caricaturas. Concebir una nueva obra tiene un valor que va más allá de interpretar el tema político.
