Para el artículo de Watchmen que escribí, tomé algunas palabras que había dicho Alan Moore sobre Watchmen, me quedé con las ganas de ampliarlas y poner su fuente.
Estos párrafos, vienen de su increible película llamada "el paisaje mental de Alan Moore".
"Aprendí mi profesión haciendo historias cortas de 3 o 4 páginas, cosa que es una excelente forma de aprender a escribir cualquier cosa, y mejoré haciendo un par de series donde me pude meter, por decirlo así, en la naturaleza del material y pude tomar más decisiones y ser un poco más experimental.
Esto comenzó a ganar premios en Gran Bretaña, lo que impresionó a los americanos.
Los americanos tienden a pensar que cada premio es un Oscar, y no se dan cuenta que los premios de la industria de la historieta son votados por 30 personas que visten anoraks y tienen espantosas vidas sociales.
Pero hasta donde ellos sabían, si yo había ganado premios entonces era un genio inglés.
Así que ellos "fugaron mi cerebro" hacia América y me pusieron a trabajar en la DC con La Cosa del Pantano, que causó cierto revuelo y que por lo menos hico que la DC confiara lo bastante en mí para darme otros proyectos, otra vez, dándome la oportunidad de escribir cualquier cosa que quisiera.
Esto condujo a Watchmen en la mitad de los años 80, y este fue uno de los libros responsables de la ridícula tormenta publicitaria que los comics y las novelas gráficas, tal como alguien en el departamento de marketing decidió que deberían ser llamadas, se volvieron populares.
Entré en el ritmo de mi carrera de escritor a comienzos de los años '80, un período muy cargado políticamente.
La mayor parte del mundo liberal miraba con terror el ascenso inexorable de la coalición derechista y jodida de Reagan-Thatcher. Al mismo tiempo teníamos elementos de fascismo comenzando a que comenzaban a hacerse oír en las calles de Gran Bretaña con el ascenso del Frente Nacional y además las cosas se veían bastante tristes.
Decidí que si quería escribir sobre este presente depresivo, la mejor manera en que lo podía hacer era con una historia ambientada en el futuro, cosa que no es de ningún modo, un recurso nuevo.
La mayor parte de la ciencia ficción distópica no trata en realidad acerca del futuro, sino del tiempo en el que fue escrita. Y el guión que hice para V de Vendetta no fue la excepción. Se ambientaba en lo que, por aquél entonces, parecía un inalcanzable momento en el futuro, es decir, en 1997 en el que Gran Bretaña ha sido dominada por una coalición de grupos fascistas y con un aventurero anarquista muy romántico que se opone a todo eso.
Para comunicar la idea de fascismo, necesitaba un símbolo que convenciera a los lectores que estaban frente a un estado policial fascista.
La cosa por la que finalmente me decidí fue poner cámaras de seguridad montadas en cada esquina que vigilaban cada movimiento.
Me imaginé que eso se parecía bastante al fascismo en acción y que los lectores estaban igualmente impresionados, y que aparentemente también lo estarían las figuras del gobierno que deberían leer en ese momento y que decidieron que cámaras de seguridad en cada esquina era justamente lo que precisábamos para el final de los ´90.
…
Pienso que había algunas cosas de Watchmen que sintonizaban bien con esos tiempos aunque para mí, tal vez, lo más importante era la narrativa, en la que el mundo que presentábamos no tenía coherencia, en términos lineales de causa y efecto.
Al contrario, era visto como un evento simultáneo y masivamente complejo con conexiones hechas a partir de coincidencias, sincronía. Y creo que fue esta visión mundial, en cualquier caso, lo que tuvo eco en el público que se dio cuenta que su visión previa del mundo no se adecuaba a las complejidades de este sombrío y atemorizante nuevo mundo en el que estábamos entrando.
Pienso que Watchmen, si tenía algo para ofrecer, brindó nuevas posibilidades para las formas en las que percibimos el ambiente que nos rodea y las interacciones y relaciones de la gente que esta en él
…
Cada vez que alguien habla sobre comics, habitualmente convierte en un gran asunto las similitudes entre historieta y cine. Estoy de acuerdo en que un autor de comics que entienda las reglas cinematográficas será probablemente un mejor creador que otro que no las conozca.
Siento que si solo vemos a las historietas en relación con las películas, entonces lo mejor que podremos hacer son películas que no se mueven.
A mediados de los ´80 intenté concentrarme en aquellas cosas que solo las historietas podían lograr.
La manera en que una gran cantidad de información puede ser incluida en cada panel, la yuxtaposición entre lo que el personaje dice y lo que podía ser la imagen que el lector estaba mirando.
Así que, en cierto sentido, creo que puedes decir que la mayoría de mi trabajo de los años ´80 en adelante estaba más o menos diseñado para ser infilmable. Esto es lo que le tuve que explicar a Terry Gilliam cuando fue elegido originalmente como director de la tan discutida película de Watchmen.
Me di cuenta de que me estaba convirtiendo en una celebridad, cosa que no me esperaba para nada, teniendo en cuenta que ser escritor de comics era la profesión más oscura del mundo cuando entré en este trabajo. "
Estos párrafos, vienen de su increible película llamada "el paisaje mental de Alan Moore".
"Aprendí mi profesión haciendo historias cortas de 3 o 4 páginas, cosa que es una excelente forma de aprender a escribir cualquier cosa, y mejoré haciendo un par de series donde me pude meter, por decirlo así, en la naturaleza del material y pude tomar más decisiones y ser un poco más experimental.
Esto comenzó a ganar premios en Gran Bretaña, lo que impresionó a los americanos.
Los americanos tienden a pensar que cada premio es un Oscar, y no se dan cuenta que los premios de la industria de la historieta son votados por 30 personas que visten anoraks y tienen espantosas vidas sociales.
Pero hasta donde ellos sabían, si yo había ganado premios entonces era un genio inglés.
Así que ellos "fugaron mi cerebro" hacia América y me pusieron a trabajar en la DC con La Cosa del Pantano, que causó cierto revuelo y que por lo menos hico que la DC confiara lo bastante en mí para darme otros proyectos, otra vez, dándome la oportunidad de escribir cualquier cosa que quisiera.
Esto condujo a Watchmen en la mitad de los años 80, y este fue uno de los libros responsables de la ridícula tormenta publicitaria que los comics y las novelas gráficas, tal como alguien en el departamento de marketing decidió que deberían ser llamadas, se volvieron populares.
Entré en el ritmo de mi carrera de escritor a comienzos de los años '80, un período muy cargado políticamente.
La mayor parte del mundo liberal miraba con terror el ascenso inexorable de la coalición derechista y jodida de Reagan-Thatcher. Al mismo tiempo teníamos elementos de fascismo comenzando a que comenzaban a hacerse oír en las calles de Gran Bretaña con el ascenso del Frente Nacional y además las cosas se veían bastante tristes.
Decidí que si quería escribir sobre este presente depresivo, la mejor manera en que lo podía hacer era con una historia ambientada en el futuro, cosa que no es de ningún modo, un recurso nuevo.
La mayor parte de la ciencia ficción distópica no trata en realidad acerca del futuro, sino del tiempo en el que fue escrita. Y el guión que hice para V de Vendetta no fue la excepción. Se ambientaba en lo que, por aquél entonces, parecía un inalcanzable momento en el futuro, es decir, en 1997 en el que Gran Bretaña ha sido dominada por una coalición de grupos fascistas y con un aventurero anarquista muy romántico que se opone a todo eso.
Para comunicar la idea de fascismo, necesitaba un símbolo que convenciera a los lectores que estaban frente a un estado policial fascista.
La cosa por la que finalmente me decidí fue poner cámaras de seguridad montadas en cada esquina que vigilaban cada movimiento.
Me imaginé que eso se parecía bastante al fascismo en acción y que los lectores estaban igualmente impresionados, y que aparentemente también lo estarían las figuras del gobierno que deberían leer en ese momento y que decidieron que cámaras de seguridad en cada esquina era justamente lo que precisábamos para el final de los ´90.
…
Pienso que había algunas cosas de Watchmen que sintonizaban bien con esos tiempos aunque para mí, tal vez, lo más importante era la narrativa, en la que el mundo que presentábamos no tenía coherencia, en términos lineales de causa y efecto.
Al contrario, era visto como un evento simultáneo y masivamente complejo con conexiones hechas a partir de coincidencias, sincronía. Y creo que fue esta visión mundial, en cualquier caso, lo que tuvo eco en el público que se dio cuenta que su visión previa del mundo no se adecuaba a las complejidades de este sombrío y atemorizante nuevo mundo en el que estábamos entrando.
Pienso que Watchmen, si tenía algo para ofrecer, brindó nuevas posibilidades para las formas en las que percibimos el ambiente que nos rodea y las interacciones y relaciones de la gente que esta en él
…
Cada vez que alguien habla sobre comics, habitualmente convierte en un gran asunto las similitudes entre historieta y cine. Estoy de acuerdo en que un autor de comics que entienda las reglas cinematográficas será probablemente un mejor creador que otro que no las conozca.
Siento que si solo vemos a las historietas en relación con las películas, entonces lo mejor que podremos hacer son películas que no se mueven.
A mediados de los ´80 intenté concentrarme en aquellas cosas que solo las historietas podían lograr.
La manera en que una gran cantidad de información puede ser incluida en cada panel, la yuxtaposición entre lo que el personaje dice y lo que podía ser la imagen que el lector estaba mirando.
Así que, en cierto sentido, creo que puedes decir que la mayoría de mi trabajo de los años ´80 en adelante estaba más o menos diseñado para ser infilmable. Esto es lo que le tuve que explicar a Terry Gilliam cuando fue elegido originalmente como director de la tan discutida película de Watchmen.
Me di cuenta de que me estaba convirtiendo en una celebridad, cosa que no me esperaba para nada, teniendo en cuenta que ser escritor de comics era la profesión más oscura del mundo cuando entré en este trabajo. "
LaNuez
¿Ese es Alan Moore... o Melcoloco?
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