

Esos son nuestros Otorongos, inteligentes, sagaces, duchos en analogías jurídicas y de interpretaciones autenticas de las normas, que por supuesto emplean en su beneficio. Sino vea usted este espécimen que contrató a sus empleada domestica como asesora en el congreso, cual es su defensa pues esta pidiendo la nulidad del proceso pues según ella solo otro otorongo puede denunciarla y no el procurador del congreso, que por supuesto denunciara por abuso de autoridad, ¿ ah, qué tal? las otorongadas se aprenden rápido, no.