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miércoles, 17 de febrero de 2010

Glenat presenta PINOCHO BLUES, un Avatar de madera

Queridos amigos:
Mañana miércoles 17 presentamos Pinocho Blues, obra que
supone la revelación de Carlos Bribián, un autor veintañero
de Soria, residente en Zaragoza, que tiene un dibujo que se
sale. De entrada, se sale de la duración estándar de las
novelas gráficas, porque ésta alcanza una extensión de
¡350 páginas! O sea, hay chicha para un rato.
La presentación se celebrará a las 19.00 horas en La Casa
del Llibre (Passeig de Gràcia, 62), y oficiará de maestro
de ceremonias don Pere Olivé, una personalidad histórica
para todos los que nos dedicamos a esto del cómic. Pere es
dibujante y director artístico, y todos nos acostumbramos a
verle en las publicaciones de superhéroes de Planeta Forum.
A sus setenta años, Pere está en una forma envidiable (física
y química) y nos deleitará con su mirada irónica pero cariñosísima
en torno a Pinocho Blues y su autor, al que conoce bien.
Pinocho Blues es una aventura iniciática y sentimental protagonizada por el célebre muñeco de madera,
con un blanco y negro tan sobrenatural como la criatura plasmada. La obra contiene momentos de alta
carga emocional y es un festín para los ojos. Bribián consigue algo muy raro: mezcla el clasicismo
estadounidense con el lenguaje del manga. Interesante, ¿no?
El otro día, hablando de esta novedad, extrañado de que yo la editara, alguien me conmentaba con cierto
estupor que no parecía el tipo de cómic que iba con mi “ideología”. Eso me descolocó unos segundos,
me dejó un poco estupefaciente: ¿me estaban llamando hijoputa a la cara?
Obviamente, se refería a que Pinocho Blues contiene un mensaje de esperanza y amor hacia el prójimo
que no casa con mis intereses habituales. Bueno, es cierto que mi “talante” (lo de ideología se me queda
muy grande) no es nada gregario y tiendo al cinismo... (Para haceros una idea, viendo Avatar soy el atípico
que quería que ganara el Coronel gay...) Pero eso no tiene nada que ver con mi labor de editor: si algo
es bueno, hay que editarlo. Y ése es el caso que nos ocupa.
Pinocho Blues tiene además algo que un editor debe saber valorar: huele a cómic de masas. El dibujo de
Carlos no sólo es preciso y precioso: juraría que ofrece esa cualidad indefinible que llama la atención y
entusiasma al gran público. Creo sinceramente que esta novela gráfica va a gustar a mucha gente de a pie.
Un abrazo.
Hernán Migoya
Para recabar más información sobre Pinocho Blues o concertar una entrevista con su autor:
Alejo Valdearena - Departamento de prensa
prensa@edicionesglenat.
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