"¿Otorongo no come otorongo?
El humorista gráfico Nilton Olivera renunció al suplemento El Otorongo aduciendo que le habían censurado esta tira porque chocaba con el gremio, es decir, con Alfredo Marcos, el dibujante de los calatos de La República.
¿Qué opinan ustedes?
¿Será cierto eso o será que el chiste no dió risa?"
Luego dentro de los mismos comentarios al post Ortiz advierte que ha recibido un reclamo de parte de Nilton Olivera por publicarla en su blog si su autorización.
"CONSTE
escrito por Beto Ortiz, diciembre 26, 2007
Conste por la presente que el autor de la caricatura presuntamente censurada me ha escrito quejándose de que se la haya publicado, que nadie me dio su permiso para hacerlo.
¿Total?
¡Se arañan cuando no los publican..
Y también se arañan cuando los publican!
Pero, por Dios....¿quién entiende a los JOTITAS?
A su vez Olivera responde:
CONSTE
escrito por Nilton Olivera, diciembre 26, 2007
LaNuez
Y no me araño. Simplemente me llega.
Me llega cuando no me publican porque no tienen la suficiente valentía para decir en público lo que murmuran casi en silencio.
Y me llega cuando me publican con información inexacta.
Pero, por Don Sata... ¿quién entiende a los MASTERS DE MÉXICO 70 ?
Como sabrán yo trabajo en el diario El Comercio, realizando caricaturas políticas por lo tanto tanto Alfredo Marcos como Nilton Olivera son colegas, ambos me inspiran admiración por su trabajo y respeto como profesionales. Desconozco el ínterin de como manejan la publicación del Otorongo, calculo que alguna regla tendrán, escrita o no para emplear a otro colega como motivo o tema de la caricatura que aparece por otro lado en un suplemento político, algunas veces por ejemplo en "Monos y Monadas" aparecían algunos colegas dibujados en las viñetas pero no en términos de ser involucrados como personajes dentro del comentario político de la caricatura.
Algunos periodistas comentan que no se debe hacer "periodismo de periodistas" imagino igual que se debe evitar hacer caricaturas de caricaturistas, porque sencillamente a pesar de trabajar con material político no somos políticos, y quien se olvide se esa regla sencillamente pierde objetividad, de igual modo hay que huir de la amistad de los políticos como si de la peste se tratara pues da lugar precisamente, a dejar pensar que se ha perdido la distancia tan necesaria a la hora de criticar la coyuntura. Reparos sobre el trabajo de tal o cual dibujante siempre existirá, pero hay canales para hacerlos llegar, en lo personal recibo muchas veces criticas y hasta insultos por tal o cual caricatura como imagino que sucederá con todos los colegas, nadie vive en una isla aislado del mundo y las criticas están a golpe de teléfono o de una tecla.